lunes, 31 de marzo de 2014



ENTREVISTA A UNA REGRESADA
Vamos a analizar una sesión regresiva desde el prisma del cliente, lo haremos por fases para que sea más ameno el relato.
El Despertar, las sensaciones, los miedos perdidos....
Contaré hasta cinco, chasquearé mis dedos  y estarás en el aquí y en el ahora, en total vigilia, sintiéndote simplemente genial.
Uno....dos....tres....cuatro.... cinco  ¡Chasquear de dedos! Y con una dulzura aterciopelada Ana intenta abrir sus ojos sin conseguirlo, ya al segundo intento se hace la luz, mira a su alrededor como sin saber dónde está, nos encontramos las miradas, la sonrió y la digo:
Terapeuta:       Buenos días!!
Ana:    Ah! Hola...
Se estira como un cachorrito recién levantado...
T: ¿Qué tal, como te encuentras?
A:        Genial, uhmm  descansada,  relajada, como si hubiera dormido toda una noche...gracias.
T:         Bueno vamos a hacer una pequeña analítica de la sesión     , lo primero ¿Qué tal te has relajado?.
A:        Muy bien y yo que pensaba que era imposible relajarme, cuanto más tan profunda, me daba la sensación de flotar, de volar. Al principio me ha costado un poco, tenía mis miedos, ten en cuenta que era la primera vez y el no saber, ¿Qué es lo que va a pasar? Siempre da un poco de yuyu.
Eso si cuando entraba en eso que usted llama trance, el sentimiento es como cuando vas en la montaña rusa y el estómago te da la vuelta, pero luego era hasta divertido, lo más curioso es que me acuerdo de todo lo que hemos hecho y hablado y por supuesto de cómo relajarme, que me va a venir genial para poder conciliar el sueño.
Notaba que unas veces estaba muy muy profunda y otras  no tanto. ¿Es normal eso?
T:         Totalmente normal, piensa que lo que logramos con la relajación hipnótica, es bajar los ritmos cerebrales, estos no están siempre en los mismos ciclos si no que oscilan, de ahí la sensación de entrada y salida del trance.
¿Cómo te has visto en tu paseo?
A:        Me ha encantado, no pensé que tuviera la capacidad de visualizar con tanto detalle, era como estar viendo una película 3D, pude percibir hasta los olores de las plantas y de las flores, ni que decir tiene la sensación que se siente cuando usted me decía: “Sientes como la brisa acaricia tu cara, o el calor del sol recorre tu cuerpo...”
T:         Háblame del castillo.
A:        Bueno, al principio me ha costado un poco verlo, pero luego sí. Era inmenso, majestuoso, pero ¿por qué me ha costado abrir la puerta de entrada? Otra cosa que no entiendo es cuando entré en el castillo, el patio estaba prácticamente vacío, oscuro y cuando salí de la zona de los “archivos de mi vida”, el patio rebosaba vida. Había mucha gente, árboles, el sol lucia y yo tenía una sensación de alegría, de paz, de tranquilidad... no lo entiendo.
T:         A ese fenómeno lo denominamos “resistencias”. Son esos pequeños miedos de todas las personas a lo desconocido. Ten encuentra que para tu mente inconsciente, ese castillo era algo nuevo y lo habitual es que las puertas estén cerradas, que te encuentres más cómoda si en el patio del castillo hay zonas algo sombrías, no hay otras personas, por lo menos hasta que comienzas a investigar a conocer tu entorno, a sentirte cómoda, recuerda como cierras o amplias tu propia zona de confortabilidad en la medida que conoces más o menos a la persona que tienes delante de ti.
Cuando has salido de las entrañas del castillo volvías sobre tus propios pasos todo te era conocido y tus miedos, resentimientos, fobias... ya no te afectan, tu carácter ha cambiado, te encuentras feliz y en paz contigo misma y con el resto del universo y por eso decides dar luz, color y compañía a tu vida presente y futura.
A: ¿Cómo un simple castillo ha eliminado en tan poco tiempo lo que lleva atormentándome tantos años?
T: No Ana, el castillo no ha hecho nada, aquí no hay magia, has sido tú. Tu mente inconsciente es quien se ha reprogramado. El  pasado que has vivido,  sigue estando en donde estaba, pero su recuerdo ya no duele, esa es la diferencia.
A: ¿Y qué me dices del camino de salida?
T: Bueno, es el camino de tú futuro. Es como si en tu vida  llegas a un túnel de lavado de coches con el automóvil lleno de barro, tan sucio que no se puede saber de qué color es y cuando sale por el otro extremo se ve brillante, reluciente, más ligero, tan es así que parece un coche nuevo.
Tú has hecho lo mismo. Llegaste al castillo llena de miedos, resentimientos, sin conocer el perdón, sin aceptarte a ti misma y cuando has salido todo era luz, amor, paz, perdón... y con esas sensaciones has comenzado a caminar por tu vida futura.
A: Aaa..., vale, ya lo pillo.
Tengo otra preguntilla.
T: Dispara.
A: Los efectos de esta terapia ¿cuánto tiempo duran? Y otra más, suponiendo que todo vaya genial dentro de unos años ¿volveré a estar cargada de miedos y resentimientos? Y otra...
T: Vale, vale. Vamos por partes. Respira, relájate y escucha.
En primer lugar, el tiempo, los efectos y su intensidad dependen todos de ti, ya que si realmente has asimilado esas dos palabras: perdón y aceptación, te será muy fácil transitar por la vida con relativamente pocos problemas, pero si no perdonas, si eres intransigente, si no te aceptas a ti misma como eres, ni a los demás como son, te queda mucho camino que recorrer. En cuanto a tu segunda pregunta, te digo lo mismo. Eres tú quien permite activar los miedos, los complejos, las fobias... Al igual que los músculos hay que entrenarlos con ejercicios físicos, a la mente le pasa lo mismo,  estudiando inteligencia emocional, meditación, escuchando música, cuidando tu alimentación, practicando yoga... y así lograras auto controlarte; no es difícil, simplemente sé constante y al igual que respiras de forma automática, lograras estos fines prácticamente de la misma manera.
A: Ahora entiendo el porqué  las personas que conozco están permanentemente como amargadas, con mala leche y en cambio otras son dulces y transmiten paz y amor, da gusto estar a su lado. Lo hemos comentado entre amigas y no lo entendíamos, mira por donde ya tenemos tema de conversación para nuestro próximo café.
Por cierto y le prometo que con esto acabo. Tengo una conocida que se pasa el día llorando, su marido falleció hace unos años, de una manera imprevista, sus hijos ya son mayores y están casado y ella está más sola que la una.  Y no sabemos si es porque está sola o porque no acepta la muerte de su marido, puede ser también que tenga algún sentimiento de culpabilidad,  el caso es que la pobre se está marchitando como las flores arrojadas al barro y es una lástima porque la verdad es que la queda vida por delante y si se arreglara un poco estaría mona. Usted ¿Qué opina? Tiene esto solución.
T: Ya sabes el dicho: todo tiene solución menos la muerte, bien tendríamos que analizar más el caso. Solución?  Por supuesto que tiene solución y seguro que si tú recapacitas un poco más sobre tu propia sesión de hoy encontraras algunas respuestas que ayudarán a tu amiga, ya que tú has encontrado el camino, tienes un poco la obligación de ayudar a otras personas.
A: Lo haré.
Gracias por todo.


jueves, 27 de marzo de 2014

¿Hipnosis ¿ ? Regresión?

¿ HIPNOSIS  Y  REGRESIONES ?
Vamos a bordar un tema que parece no estar  bien definido, ya que en numerosas ocasiones me preguntan ¿Cuál es la diferencia entre hipnosis y regresiones hipnóticas?.
Como todos sabemos la definición empírica de hipnosis:
“Hipnosis es un estado alterado de la conciencia”
Es decir cuando estamos o nos sentimos concentrados, focalizados en nuestras propias ideas, situaciones o pensamiento,  lo tan hablado: vas en el coche  y cuando llegas a tu destino no sabes ¿Qué es lo que has hecho? Si has frenado en un semáforo, o no... el caso es que has llegado sano y salvo a tu destino. Bien eso es un trance  o un estado hipnótico.
Regresión como la propia palabra indica  es volver, volver a un punto o situación.
Si pensamos ¿Qué es lo que comimos ayer? Estamos realizando una regresión.
El Problema es cuando queremos recordar o buscar algo del pasado y nuestro consciente no logra el objetivo. O cuando queremos ubicar el comienzo o el porqué de un miedo o trauma psicoemocional, que normalmente suelen estar concebidos en nuestra más tierna infancia, o en nuestro nacimiento o incluso en otras vidas anteriores.
Esos traumas, miedos, lesiones o situaciones que nos condicionan la felicidad de nuestro presente y futuro debemos limpiarlas, sanarlas a través de las técnicas adecuadas.
La terapia regresiva parte de la tesis de que la mayoría de la enfermedades tienen un origen psicosomático, bloqueando nuestro inconsciente nuestras experiencias del pasado, generando de esta manera, parte de nuestros malestares,  tanto psíquicos como físicos,  del presente.
Ahora bien os preguntareis, ¿Qué tiene que ver todo esto con la hipnosis?.
Pues sí, si tiene que ver,  ya que para introducirnos en las partes sensitivas de nuestra historia personal, debemos bajar la oscilación de nuestras ondas cerebrales, es decir,  relajarnos y esto normalmente lo hacemos mediante técnicas hipnóticas de relajación y profundización. Ciertamente podría realizarse mediante una relajación clásica o Zen.
Personalmente opino que, dependiendo del tipo de cliente y de lo que estemos buscando, se deben aplicar unos procedimientos u otros, en ocasiones con una relajación suave se consiguen resultados soberbios y en otras necesitaremos una profundización más concienzuda.
Es decir mediante hipnosis damos  comienzo a la  alteración del estado de conciencia, ya sea para aplicar técnicas de hipnosis clínica (adiciones, miedos, fobias,  o ya sea para comenzar una regresión.
Con la hipnosis tratamos el problema en el presente, con la regresión buscamos el origen del problema.
En posteriores pots profundizaremos sobre este apasionante archivo de nuestra mente que son las regresiones, indagaremos en lo más profundo de nuestros propios secretos.